Una de Reyes y Villanos

Hay que ver la que se ha montado porque al señor Mike Mayhew (Dibujante de la Marvel Comics) se le ha ocurrido utilizar una fotografía de S.M. el Rey don Juan Carlos I, como modelo para la portada de una nueva serie limitada de la editorial de Spiderman. El problema no sería muy grande de no ser porque la foto en cuestión es la oficial de la Casa Real y, además, el señor Mayhew no se ha limitado a inspirarse en ella sino que ha copiado hasta el más mínimo detalle incluyendo todas las medallas e insignias que invisten al Rey como Capitán General de todos los Ejércitos, lo único que no es igual es la cara. Visto desde lejos esto tampoco debería tener mucha importancia, pero si nos metemos un poco más en la historia resulta que el personaje en cuestión no es otro sino Magneto, presentado como “el mutante más poderoso de la tierra”, enemigo mortal de la Patrulla-X (X-Men) y, en dos palabras un cabronazo integral. En todos los miles de argumentos que ha tomado el universo Marvel durante su existencia, ahora resulta que el Sr. Eric Jensen (Magneto) es dueño y señor del mundo, somete a la humanidad con brazo de hierro y como tal dictador nos lo han querido presentar con esa imagen. Entendida así la trama, es comprensible el mosqueo general de la Casa Real y sus rápidos intentos para que dicha portada sea suprimida de la página web y de la edición en papel, al menos de la española, ya que la americana salió hace unas cuantas semanas. Por mucho que me apasione el mundo del comic reconozco que en él también existen aprovechados e inútiles incultos que no tienen respeto por nada en absoluto. Y en parte entiendo a este dibujante, supongo que habrá estado buscando ejemplos de “grandes” dictadores de la historia (lo de grande es solo porque ellos se creían así) y tan solo habrá encontrado a señores bajitos, calvos, con bigote o bastante feos y peludos, mientras que lo que buscaba era dignidad, grandeza, un porte que inspirara respeto, y claro está, como los ejemplos de su país no atienden precisamente a ese perfil tuvo que venirse a la vieja Europa, con más tradición, mas abolengo y mejor gusto en todo. Porque si no diganme, ¿se imaginan a un ser con el poder de someter al mundo a su voluntad con el cuerpo de George W. Bush, o con el barrigón cervecero de Bill Clinton? No impondría demasiado ¿verdad? En un país donde el símbolo más regio ha sido el pelucón de Washington no me extraña que tengan que venirse aquí a buscar símbolos de auténtica nobleza. Ahora bien, un poco de documentación no les vendría mal a ciertos tipos de la industria americana del entretenimiento, ya que tienen menos ganas de estudiar que un chaval de quince años en plena pubertad y así nos encontramos ejemplos de barbaridades tipo “Misión Imposible 2” donde quemaban los pasos de Semana Santa en una Sevilla invadida por Falleras, o “Incógnita” (Incognito en Inglés) película protagonizada por Jason Patric en la que la imagen del viejo casero vasco y toda su familia está pensada para que a los dirigentes del PNV les de un síncope al verla (recomiendo encarecidamente este film para los que quieran pasar un buen rato). Total, que el tema no pasará a mayores, el Sr. Stan Lee (presidente de la Marvel) mandará una atenta carta disculpándose por todo y se frotará las manos al saber que se va a revalorizar la demanda de ese número en cuestión por este temita, ya estoy viendo a las tiendas especializadas importándolo a mansalva. En fin, otra anécdota para la historia de la Casa de Borbón, pero es que la culpa la tiene usted Don Juan Carlos, no se puede tener tan buena planta, mire como no han tomado de modelo al Príncipe de Gales y ese si que tiene chicha para un villano de leyenda ¿eh? Y publicidad gratis en la prensa rosa, ¡Ay, señor Lee! Esta vez confundimos la campaña de marketing.

Un beso a todas y un abrazo a todos.