La estupidez humana no tiene límites. ¿Quién dijo eso? Aparte de mí, claro está, que a medida que me hago mayor más veces la repito.
Hoy me he enterado de que, allá por el mes de mayo, una importantísima multinacional de aperitivos, Pepsico, ha lanzado al espacio, por primera vez en la historia de manera premeditada, un anuncio de televisión con destino: EL ESPACIO EXTERIOR. Digo de forma premeditada porque desde el comienzo de las emisiones radiofónicas, las ondas hertzianas han salido al exterior de la tierra sin rumbo fíjo y sin control, con lo que eso implica, que en posibles planetas habitados de constelaciones relativamente cercanas, aproximadamente a unos cien años luz de distancia, que es más o menos el tiempo que lleva la radio en funcionamiento, se están recibiendo ahora las primeras palabras que Guillermo Marconi lanzó, desde el Sur de Inglaterra a Nueva York, sin la utilización de hilos. En sistemas más cercanos, aproximadamente a sesenta años luz, estarán disfrutando de la emisión de "La Guerra de los Mundos" de Orson Welles, lo que no sabremos es su reacción, lo mismo hasta se piensan que formamos parte de otra de sus conquistas interplanetarias, o se alarman porque creen que ellos pueden llegar a ser los siguientes en el plano de dominación de los Marcianos.
La idea es tonta a simple vista, en realidad sólo se trata de otro truco publicitario para que la empresa en cuestión sea, si cabe, más conocida todavía a nivel mundial (ahora sideral). Y así, de paso, se financia con una pequeña inyección de capital privado a la investigación espacial, que nunca les viene mal a esos locos que miran al cielo que las grandes corporaciones se acuerden de ellos de vez en cuando.
Lo que yo no se es que es lo que pensarán los habitantes del sistema en cuestión cuando les llegue el anuncio de Doritos, que al parecer consiste en una animación, donde los propios snacks de trigo cobran vida para formar una especie de tribu nativo americana. Un mensaje ya algo (por no decir muy) ambiguo para cientos de civilizaciones de este planeta, no digamos como será para seres extraterrestres. Eso si llegan a descifrarlo, ya que ha sido emitido en código binario (ya saben, ese de ceros y unos 000111001000100) que según los científicos, puede ser descifrado fácilmente por todos los seres del universo, aunque sea un código matemático creado por humanos. A eso lo llamo yo optimismo científico y lo demás son tonterías.
Supongo que el día que nuestros vecinos reciban el comercial en exclusiva que se ha realizado para ellos, ya llevarán siglos "disfrutando" de nuestra "maravillosa" programación televisiva mundial. Y conocerán más de nuestra historia reciente que nosotros mismos. Si son inteligentes, que supongo que lo serán, estoy seguro de que tratarán de evitar cualquier tipo de contacto con nosotros, una raza que vive para matarse los unos a los otros por algo tan estúpido como el petróleo no tiene que ser la mejor tarjeta de presentación a nivel estelar.
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