A lo hecho

Jamás me he considerado una persona curiosa. En el mal sentido de la palabra (Cotilla, visillero, marujón, metomentodo...). Siempre me ha dado un poco igual la vida de aquellos a los que no conozco, famosos incluídos (a los cuales, en realidad, tampoco conozco sino que sólo se de su existencia). Pero un domingo por la tarde con la única distracción de tus suegros en casa, ya que en el lugar en el que todavía vivo, lo de ver la televisión es una especie de odisea, pues escuchar historias sobre gente, sus vidas y sus misterios, no es mal plan a fin de cuentas.

Lo que voy a tratar de relatar ahora es, en parte causa de nuestra situación actual y en parte explicación de porqué estamos así hoy en día.

Matrimonio "A", ella, la "Señora-A", compañera de mi suegra, trabajando a jornada completa con un sueldo de entre 700 y 800 euros. Él, el "Señor-A", trabajador eventual, actualmente en paro. Dos hijos. Él "Niño-A" arrejuntadito con la "Niña-B" y con un bebé recién nacido, El "Bebé-C". Y una niña, la "Niña-A", diecinueve años muy bien cumplidos por lo que dicen, expulsada de colegio de monjas y aficionada a echarse "novios" mucho mayores que ella, separados y con hijos. El hijo-A no da un palo al agua y el señor-A decide buscarle una recomendación (enchufe) en una obra pública enorme y con proyección. Dos semanas o dos días y el niño-A se vuelca un dumper, con él encima, claro está. Cuando se despierta no recuerda nada, o no quiere recordarlo. Las sospechas indican que el niño-A iba más colocao que el batería de Bob Marley. Un par de traslados laborales para marearlo (aún más, si cabe) y cuando le cumple el contrato no se le renueva. El niño-A y la niña-B tienen que dejar el piso de alquiler que tenían juntos para irse a la Casa-A, con Bebé-C y todo.

"La niña-A no está muy centrada", palabras textuales de mis suegros y tiene una boca que no suelta más que lindezas. No tiene oficio ni beneficio (aunque esto segundo lo pondrá en duda el novio separado con dos hijos que tiene ahora).

"No nos explicamos como han podido salir así los niños, porque los padres ni por asomo son así" Para nada. El señor-A solicitó un crédito para reparar el edificio en el que viven cuando era presidente de la comunidad. Le concedieron nosecuantosmil euros y tan sólo pagó el pintado de la fachada, con el resto se fueron de viaje al caribe, a todo trapo. No se si sólo el señor y la señora A o también toda la tropa. Ahora tienen un problemón y gordo, porque no tienen un duro y tienen que pagar el crédito.

Pues, que queréis que os diga. Ésto es sólo uno de los miles de casos, millones diría yo, que hay por ahí sueltos por nuestros pueblos de Dios. Gente que quiere vivir como el vecino y no puede, de modo que se las ingenia para que un banco se lo subvencione todo. Firma lo que sea y después... pues después saldrá llorando en la televisión porque le han quitado la casa... por irse al caribe.