lusión. Esa fue la primera emoción que me sobrevino cuando leí en el Diario Sur que, desde el Ayuntamiento de Málaga, se había puesto a disposición de los ciudadanos una aplicación para smartphones, destinada ésta a recoger y gestionar todas las quejas y sugerencias sobre nuestra querida ciudad.
"MLG Funciona", que así se llama la aplicación en cuestión, entra dentro del plan global de Smart City. Preparada para las dos principales plataformas móviles (iOS y Android) y dotada de geolocalizador, permite al usuario, plantear su solicitud dentro de unos límites establecidos. Esta que aquí expongo es mi experiencia con dicha aplicación.
El 12/05/14, tras varios intentos infructuosos de exponer un par de quejas sobre la limpieza de un tramo concreto de la Avenida Carlos de Haya (exactamente el colindante al muro de la Fundación San Telmo. Si pueden pasar por ese lugar, háganlo, ese sitio no tiene desperdicio, en realidad tiene cientos de ellos). Realicé una queja sobre el estado del parque infantil situado sobre el falso túnel del Camino de Antequera (Calle Ortega de Prados, a la altura del número 9). El geolocalizador funcionaba en esa ocasión (no como en las anteriores) de manera que, expuse brevemente mi queja y adjunté una foto (no me dejaba publicar más de una). En fin, la aplicación en si está bastante limitada, supongo que por temas de almacenamiento o velocidad de transmisión o vaya usted a saber que tecnicismo.
El caso es que pude enviarla y a los dos días recibí un mensaje en mi correo electrónico avisando de que el caso había sido revisado. ¡Pardiez que rapidez! ¡Esto funciona! Se me saltaban las lágrimas de emoción. Pero no. Falsa alarma. Debía de tratarse de algún tipo de respuesta automática o una especie de protocolo para tener contento al ciudadano de a pie. Inocentes como yo que se creen que estas cosas sirven para algo. Iluso de mi.
Pasaron los días, pasaron las semanas y ya casi me había olvidado del tema cuando, un día me dio por mirar aquella aplicación que me había bajado desde la web del ayuntamiento. Y si, allí estaba. Un mes y pico después del primer contacto. Mi aviso había cambiado de estado a "Terminado". Abrí la ficha intrigado para conocer el resultado y... nada. Pero nada de nada. En el campo de comentarios de técnico no había nada escrito. O, tal vez si. Pasé el dedo por encima de la foto adjunta y como por arte de magia, pude distinguir unas frases, escritas como en el borde de una hoja de papel. Frases que, con mucha dificultad, paso a transcribir:
- Talher: tras visita de inspección técnica se determina que el área de juegos se encuentra en perfectas condiciones y cumple con todos los requisitos de seguridad. El parque está limpio y se han revisado todos los elementos de juego. Los cuales están en buenas condiciones.
Decepción. Esa fue la nueva emoción que sentí al leer eso. Y también algo de Enfado. Bueno, algo no, bastante.
Como no me gusta contestar en caliente a las cosas, me esperé a estar un poco más relajado. Se acercaban las vacaciones, así que el día 24/07/14, entré en la web del Ayuntamiento de Málaga y en la sección de Quejas y Sugerencias les dejé esto:
-
Estimados Sres. Les escribo la presente para formalizar mi queja ante dos asuntos relacionados. El pasado mes de mayo, realicé una petición de revisión a través de la aplicación de avisos para iPhone MLG FUNCIONA (Nº CIUD@1/2014/835). Tardaron en responder a mi solicitud casi un mes, excesivo ese tiempo para una aplicación de alta tecnología. Por otro lado, una vez recibida la respuesta, me fue casi imposible leer el contenido de la misma, ya que el texto aparece casi oculto y sólo visible en un campo de una única línea. Tienen un problema de programación ahí que deberían solucionar. Dicho esto, mi queja principal es al respecto de la situación del parque situado en la Calle Ortega de Prados, sobre el falso túnel del Camino de Antequera. Dudo mucho que el técnico que respondió a mi queja en la aplicación se pasara por el lugar, porque este parque está en unas condiciones bastante malas. Sucio, deficientemente acotado (muy peligroso esto, ya que se encuentra bordeado por dos vías bastante transitadas por vehículos), mal equipado (una única papelera) con bancos/jardineras deteriorados, pavimento levantado, tubos de riego al aire y placas de goma avejentadas, no fijadas e inconexas entre las dos zonas de juego. Los niños tienen que convivir con perros que continuamente pasan por la zona, defecando y miccionando en las instalaciones. Está sucio y deteriorado. Les puedo enviar unas cuantas fotos señalando las deficiencias al detalle si me facilitan un medio de hacerlo. Sinceramente, dudo que cumpla con la normativa a la que hace referencia el técnico que respondió y la cual les agradecería que me facilitaran, porque no he podido encontrarla. Quedo a la espera de su respuesta. Reciban un cordial saludo. Lo más gracioso de todo viene a continuación. Sorpresa inesperada. Cuatro días después, tan sólo cuatro días, recibo una respuesta del departamento de Quejas y Sugerencias. ¿Milagro? No, por Dios. Equivocación. El correo comenzaba con "Estimado Eusebio", de modo que, me dio en la nariz que no era para mi. Cierto es que, casi de inmediato, recibí otro correo pidiéndome disculpas por la equivocación. Y sin yo solicitarlas. De motu propio. Muy loable por su parte. Pero, eso no les exime de que, a fecha de hoy, 12/09/14 aún no haya recibido respuesta a mi queja y que todo esté sin solucionar. Y ahora yo me pregunto ¿De qué sirve tanto esfuerzo? Tanta inversión. Tanto gasto de personal. Tanto derroche de tecnología. Tantas molestias por mi parte y por la del Ayuntamiento. Tanta pérdida de tiempo en general... si el resultado al final va a ser el mismo. Que todo se quede igual. Bueno, supongo que, si todo fuera eficacia y eficiencia, no tendría material para escribir estas cosas. |
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